¿Por qué elegir un perrito mayor?
La experiencia de vida para comprender a los humanos, su capacidad para subsistir a pesar de las dificultades, para protegernos y acompañarnos, hacen de ellos los amigos más interesantes del mundo. La madurez adquirida valora sobre manera pertenecer a un grupo y al sentido de familia.
POTY
Compartamos la carta que recibimos de Paulina Rojas y su maravillosa familia que adoptaron a Poty, hembrita de 10 años. Poty es una perrita maravillosa, dulce, noble, regalona, bien comportada, dormilona y tan agradecida…saben lo que ella más disfruta es caminar lentamente por el jardín, mirar el horizonte y oler las flores, por supuesto también le gusta salir de paseo, vamos al parque, a caminar, o a casas de amigos y familiares porque a ella le encanta” la vida social”… también le gusta que yo le rasque la cabeza ahí ella no puede más del relajo, y disfruta de su pellet mezclado con agua tibia …..saben lo bueno de todo esto, es que yo me siento feliz de hacerlo no saben la retribución de amor que yo siento, con esta acción “me creo” un poquito mejor persona, haciéndole el bien a alguien, a otro ser….entregando simplemente lo mejor de mí y no es a cualquier perrito, es un perrito que lo pasó mal durante casi toda su vida.. cuando conocí a Potina en el CRC me dijeron que tenía 10 años de vida y que nadie la quería por viejita, siendo que llevaba casi 3 años ahí…..me comentaron su historia que la habían encontrado justo para un 18 de Septiembre con otra perrita amiga su inseparable y que los fonderos les pegaban y las espantaban…resulta que su amiguita por ser “más linda estéticamente” y joven, encontró dueños inmediatamente y Poty no…díganme acaso eso a ustedes no los conmovería, quienes somos nosotros para decidir sobre el futuro de un perrito debido a su “belleza” o juventud..¿Nuestros abuelitos no sirven? ¿Las personas feas tampoco? ¿Qué es feo o lindo?¿Quién establece esos parámetros estúpidos?….sin pensarlo dos veces junto a mi pareja nos trajimos a nuestra viejita a casa y ha sido lo mejor que nos ha pasado….ahora yo me pregunto ¿cuántas Potinas más hay?…porque no darle la oportunidad a un perrito adulto de ser feliz en lo que resta de su vida …y cómo es sabia la vida!! …Ustedes lo hacen feliz y él los hace felices a ustedes…..En CRC está Mildred una viejita que fue compañera de Poty, ¿porqué no darle la oportunidad de ser feliz junto a una familia que la ame y respete? Y verán lo agradecidas que son ellas y el amor incondicional que les va a entregar…..ni siquiera lo duden, un adulto es un excelente compañero, un amigo fiel, leal, sabio, no les ocasionará destrozos como los cachorros (si eso los perturba), sino todo lo contrario les dará calma, tranquilidad y su alma estará en armonía ya que sabrán que han hecho lo correcto, no se arrepentirán.
MILDRED
Nuestra dulce y tierna Mildred, que es mucho menor que Poty, pero tan sábia y entretenida como ella, sigue esperando un hogar. Conocerla es amarla. Solo necesita que tu la encuentres!
La sarna demodesica, es producida por un ácaro, que normalmente vive en los folículos pilosos de todos los perritos. En algunos de ellos, cuando sus defensas bajan por depresión, mucha sensibilidad a los cambios, mala alimentación, etc., los ácaros proliferan sin medida produciendo daños severos en su piel. NO SE CONTAGIA pero las personas suelen confundir cualquier perdida de pelo en un perrito con algo contagioso, y eso lleva a la ignorancia de apartarlo aumentando sus sintomas por el abandono.
CARLA
Carlita fue recogida por Lidia, una voluntaria que la encontró en la calle, a punto de tener sus bebés y sin fuerza para dar ni un paso. En brazos la trasladó a su casa y luego al CRC. Allí dió a luz rodeada de cuidados, pero producto de su vida de sufrimiento, comenzó a perder el pelo de todo el cuerpo, especialmente cara, brazos y guatita: sarna demodesica.
Se le dió el tratamiento veterianario adecuado y aun así, parecía no mejorar lo sufientemente rápido. Nuestro veterinario doctor Agurto, insistía en cambio de habitat. Carlita, amistosa y sensible necesitaba un hogar urgente, pero su adopción no llegaba.
Corina, voluntaria del CRC, le brindó hogar temporal en su casa. Tal cual se suponía, allí encontró la tranquilidad, seguridad y compañia junto a Catire, perrito generoso que la acogió como su hermana.
En un mes, Carlita se transformó en una belleza sana y felíz. Finalmente, la amorosa familia que la había acogido temporalmente, se enamoró de este angelito y la adoptó.
Hoy, Catire, Carlita y Esperanza, otra perrita adoptada en el CRC (también luego de pasar muchas penas), forman parte de una gran familia, conformada por humanos, ellos y un gatito.
EUGENIA
Una versión clínicamente más severa aún fue Eugenia. Su cuerpo en una semana parecía una gran herida. Triste por el abandono su cuerpecito no quería vivir más.
Se comenzó con el tratamiento veterinario de forma urgente, aunado a la preocupación y cuidados amorosos de funcionarios y voluntarios. Ella comprendió que no estaba sola, que la ayudaríamos en su dolor y se reforzó la parte «AMOR».
Hoy gracias a todo esto, está fuerte, recuperada y puede mostrar su simpatía y carácter juguetón, alegre y amoroso. Pero falta lo más importante para ella, una FAMILIA de la cual formar parte, un lugar propio donde ella con su dulzura aporte a la felicidad de quienes la adopten.